Extraños llenos de coraje
De vuelta a su lugar favorito, Sam se encuentra con un joven semental peludo, la belleza rubia ha oído hablar del tamaño de las pollas que hay en la zona y quiere participar. Atrapando a Sam, su suerte está echada y Sam se levanta y empuja al musculoso joven hacia él y le llena la cara con la carne dura que se le ofrece. Sorbiendo todo el camino para que su cara esté empujando contra sus peludas bolas y su entrepierna, obteniendo todo el sabor de la jugosa polla de Gabriel. Devolviéndole el favor, Sam está pronto dentro de su poco encontrado compañero de folleteo, primero la lengua, luego los dedos y tirando hacia atrás de su polla y sus pelotas, haciendo suyo al muchacho que se ha metido en el asunto. No es uno de los que huyen, Gabriel quiere más y le mete la cara a Sam en su grieta peluda, mojándola y abriéndola, ¡ya sabe lo mucho que le va a estirar! Tirando del joven semental peludo desnudo hacia él, con el culo levantado y sin ningún sitio al que ir, la polla gigante de Sam se desliza dentro y va directo a las pelotas, ¡no jodas! Para aumentar la velocidad, Gabriel es empujado hacia abajo, incapaz de empujar hacia atrás, así que se lo lleva todo sin ninguna opción, no es que vaya a decir que no a la polla. Dándole la vuelta y agarrando su pierna peluda, Sam nos da a nosotros y a él el mejor acceso, listo para disparar su carga por todo ese culo peludo, dejando que Gabriel acabe con él mientras el esperma le da una bofetada en su agujero fruncido, haciendo espuma mientras su pecho peludo se cubre con su propia carga a chorros y lejos de su polla temblorosa.