Una nueva escena con Korar Darver. Al tatuado Romeo le encanta tomar las riendas, y obliga a Korar a abrir su suave agujero con un túnel de cerdo y un arnés de cuero, escupiendo su camino en lo más profundo del jovencito atado. El chico amordazado no tiene ninguna opción, y no tiene intención de escapar mientras su agujero se abre con el puño y se folla a lo bruto, dejando una follada casi sin fricción para que el rudo dom disfrute.